Había paraguas abiertos
para soportar la tormenta.
Paraguas abiertos,
alambres de púas
y el filo de la navaja
punzando mi cuello.
Algunos paraguas
se agujerean
en trozos de gotas
que el cielo elige arrojar.
Encadenados a negras nubes,
promesas de muerte,
asesinatos fallidos.
Disparos en la noche:
rayos.
La huida de los cobardes,
la caída del imperio,
los presos de la noche.
La tormenta comanda,
dirige
fracciones,
pequeños restos
que llaman amor.
Paula Putero
Como es tu mail? Quiero decirte unas palabras pero en privado
ResponderEliminarPaula? Tu nombre o tu seudonimo?
Me deleita la forma en que escribis
Hace meses te sigo. Creo que cai googleando la frase cadaver exquisito de fitto.
te dejo mi email
ResponderEliminarazul.dai@gmail.com
escribime